Reanimación cardiorrespiratoria

¿Qué es la reanimación cardiorrespiratoria? También conocida como RCR, la reanimación cardiorrespiratoria es el conjunto de medidas que deben tomarse para restablecer las funciones cardíacas y respiratorias cuando, por detención del corazón o de la respiración, alguna persona está por unos minutos en el estado de muerte aparente; antes que en un lapso de 4 a 6 minutos, la muerte aparente se transforme en muerte definitiva o muerte biológica.

🔴 En este artículo conseguirás:

1. Cómo hacer la reanimación cardiorrespiratoria

    - Técnicas de respiración artificial o reanimación respiratoria "boca a boca"

    - Pasos para efectuar un masaje cardíaco externo

CÓMO HACER LA REANIMACIÓN CARDIORRESPIRATORIA 

En los Estados Unidos, donde este tema ha sido muy bien estudiado con fines didácticos, se han esquematizado los sucesivos pasos de este auxilio, en forma tal, que sea fácil recordarlos. Estos pasos sucesivos han recibido los nombres de A, B, C y D.

Para que nos sirva también donde se habla español, se han propuesto las siguientes palabras, que no corresponden a la traducción literal del inglés, pero sí a las 4 etapas:

A corresponde a "apertura de las vías aéreas".

B corresponde a "boca a boca" (método de respiración artificial).

C corresponde a "comprensión cardíaca" (masaje cardíaco).

D corresponde a "tratamiento definitivo" o "medicamentos", lo que será aplicado en algún centro médico.

El estado de muerte aparente puede comenzar por detención de la marcha del corazón (por infarto del miocardio, pardo cardíaco, colapso circulatorio, ciertos casos de electrocución, etc.). Entre 30 y 60 segundos después de la detención cardíaca, se produce también la detención respiratoria.

Otras veces se inicia la muerte aparente por detención de la respiración (por asfixia, ciertos casos de electrocución, etc.). Es frecuente que el corazón siga latiendo por unos minutos y el daño cerebral pueda tardar un poco más en hacerse irreversible.

A continuación le indicamos cómo hacer la maniobra de reanimación cardiorrespiratoria y así devolver la respiración y el pulso al paciente que esté en estado de muerte aparente. 

Técnicas de respiración artificial o reanimación respiratoria por el método "boca a boca" o "boca a nariz"

  • Mantener las vías respiratorias abiertas. Para mantener bien permeables las vías respiratorias, trátese de extender hacia atrás lo más posible la cabeza del asfixiado.
  • Esto se consigue levantando con una mano la nunca, mientras con la otra, se extiende la cabeza hacia atrás lo más posible.
  • Después, mantener con una mano el mentón hacia arriba y con la otra la cabeza extendida hacia atrás.
  • Si es necesario, limpiar la boca de cuerpos extraños (piezas dentarias, mucosidades, etc.), con un dedo revestido de un pañuelo o con dedos. 
  • Si se sospecha la posibilidad de una fractura de la columna cervical, no se hará la maniobra de hiperextensión de la cabeza por la posibilidad de lesionar la médula espinal.
  • Si hay dificultad respiratoria, en este caso, levantar la mandíbula desde los ángulos del maxilar (debajo de las orejas). También se puede solucionar el problema introduciendo en la boca el pulgar revestido con un pañuelo y el dedo índice debajo del mentón, traccionando con ambos dedos el maxilar hacia arriba.
  • Abra bien la boca, inspire profundamente y luego aplique su boca sobre la nariz o la boca del asfixiado (o sobre ambas en el caso de niños) y sople hasta ver levantarse el tórax. Cuando se insufla en boca, comprimir la nariz entre el pulgar y el índice; en esta forma el que presta ayuda, a la persona inconsciente impedirá que el aire insuflado por la boca se escape por la nariz.
  • En ese momento, dejar de insuflar para que el aire salga solo del tórax, repitiendo la insuflación unas 12 veces por minuto. (En los niños, el número de insuflaciones será de 20 a 30 por minuto, y la cantidad de aire insuflado será proporcionalmente menor. En el caso de un recién nacido o niño pequeño hay que cuidar de no exagerar la inclinación hacia atrás de la cabeza).
  • Se sabrá que el aire penetra en los pulmones del auxiliado, por las siguientes tres comprobaciones: a) El pecho se dilata al insuflar y disminuye el tamaño al dejar de hacerlo. b) Al insuflar se siente cierta resistencia mientras se expanden los pulmones. c) Se oye el escape del aire por la nariz o la boca, o por ambas, cuando se da tiempo para la espiración después de la insuflación.
  • Si no hay pulso o latidos del corazón, es indispensable que otra persona efectúe simultáneamente masaje cardíaco. Si se está solo, cada 15 compresiones sobre el corazón, efectuar rápidamente dos insuflaciones. 

Pasos para efectuar un masaje cardíaco externo

Masaje cardíaco externo

A continuación le indicamos los pasos a seguir para que sepa cómo se hace un masaje cardíaco externo:

  • Colocar al paciente acostado de espaldas sobre una superficie plana y rígida, por ejemplo con una tabla. Si no hay otra cosa, acostar al paciente sobre el suelo. Descubrir el pecho. Si el paciente no respira y se está solo, iniciar el tratamiento con cinco respiraciones boca a boca. Luego cada cinco presiones sobre el corazón, intercalar una respiración.
  • Colocar el talón de una mano sobre la mitad inferior del esternón apoyando la otra mano sobre la primera. No presionar sobre la extremidad inferior del esternón (apéndice xifoides) que se extiende a la parte alta del abdomen.
  • Presionar rápidamente con las manos hasta que se hunda la parte media del pecho unos 4 a 5 cm, y soltar también rápidamente. (Para evitar cansarse, es conveniente que la persona que auxilia mantenga sus brazos extendidos y que se incline hacia adelante de tal manera que sus hombros están casi directamente por encima del pecho del paciente). Efectuar este movimiento unas 60 veces por minuto.
  • Estos movimientos deben efectuarse ininterrumpidamente, debiendo ser de igual duración la presión y el aflojamiento de la misma.
  • Si por cualquier razón se debe interrumpir este masaje cardíaco, no debe ser por más de 5 segundos. Cuando el que presta auxilio está solo, cada 15 compresiones del corazón, debe inflar rápidamente el tórax del paciente dos veces. Seguir el masaje hasta que el corazón vuelva a latir o hasta que la muerte sea segura.
  • Si hay otra persona presente, ella se encargará de efectuar simultáneamente respiración artificial "boca a boca".
  • Ayuda a evitar lesiones de las costillas y vísceras abdominales, si se evita tocar la pared del tórax con la palma de las manos o con los dedos. Presionar exclusivamente con el "talón" de las manos.